jueves, 21 de enero de 2010

Poema de Du Fu a Klingsor (Herman Hesse)

“¡Oh, mundo abigarrado y delirante,
Cómo sacias,
Cómo sacias y fatigas,
Cómo embriagas!
Lo que hoy aún brilla
Pronto desaparecerá.
Pronto silbará el viento
Sobre mi tumba oscura,
Sobre el niño pequeño
Se inclinará la madre.
Quiero volver a ver sus ojos,
Su mirada es mi estrella,
Todo lo demás puede irse, disiparse.
Todo muere, todo ansía morir.
Solo queda la eterna, la Madre
De la que venimos.
Su dedo juguetón escribe
En el aire fugaz nuestro nombre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario